Depósitos de agua, estanques y canales
¿Qué son los depósitos de agua?
Los depósitos de agua son comúnmente utilizados para el suministro de agua potable en zonas urbanas y rurales, para el riego de cultivos, para la producción de energía hidroeléctrica, para el enfriamiento de equipos industriales y para otros propósitos relacionados con el agua. Los materiales más comunes utilizados para la construcción de depósitos de agua son el cemento, el acero, el plástico y el fibrocemento.
Es importante destacar que los depósitos de agua deben ser diseñados, construidos y mantenidos adecuadamente para garantizar que el agua almacenada esté limpia y segura para su uso previsto. Además, es fundamental asegurarse de que los depósitos de agua estén protegidos contra la contaminación externa y los riesgos naturales como inundaciones o terremotos.
¿Qué materiales impermeabilizantes utilizar?
Existen diferentes tipos de materiales impermeabilizantes que pueden utilizarse para asegurar la estanqueidad al agua de un depósito. A continuación, presentamos algunos de los materiales más comunes:
- Membranas asfálticas: son láminas de asfalto modificadas con polímeros que se adhieren a la superficie del depósito. Son flexibles y resistentes a la abrasión, pero requieren un sustrato liso y uniforme para su aplicación. Este tipo de productos solo es apto para depósitos de agua no potable.
- Membranas de PVC y TPO: son láminas de PVC de alta resistencia que se sueldan a la superficie del depósito. Son flexibles y resistentes a la abrasión y a la intemperie, además en SOPREMA tenemos modelos diseñados para agua potable.
- Morteros impermeabilizantes: son morteros de alta resistencia a base de cemento y polímeros que se aplican en capas sobre la superficie del depósito. Son resistentes a la abrasión y a la intemperie, y tienen una buena adherencia a la superficie.
- Impermeabilización líquida: son recubrimientos a base poliuretano que se aplican en capas sobre la superficie del depósito. Son resistentes a la intemperie y a la corrosión, y tienen una buena adherencia a la superficie. Las gamas Alsan® Pur y Campolin® Neo son dos opciones idóneas para la impermeabilización de depósitos. Además, Campolin® Neo tiene certificado de potabilidad.
La importancia de la impermeabilización
Es extremadamente importante impermeabilizar un depósito de agua para evitar fugas y pérdidas de agua, así como para prevenir la contaminación del agua almacenada.
Un depósito de agua que no esté adecuadamente impermeabilizado puede tener fugas que causen pérdidas de agua, lo que puede resultar en un desperdicio significativo de recursos hídricos y también aumentar los costos de suministro. Además, si el agua almacenada se filtra a través de las paredes del depósito, puede contaminarse con materiales tóxicos y sustancias no deseadas, lo que puede afectar la calidad del agua y hacerla insegura para el consumo humano.
Además, la humedad que penetra en el depósito puede provocar la proliferación de moho y hongos, lo que puede generar problemas de salud. Asimismo, la presencia de humedad en las paredes del depósito puede debilitar la estructura y reducir su vida útil.